En una tarde nos recorrimos la provincia de Salamanca. Primero en la ciudad y despues un rincón, desconocido para la gran mayoria, pero maravilloso, Navaredonda con su pico El Calvitero. Fue una preboda distinta y nueva para mi. Eran 4 y no 2 como habitualmente, dos preciosos niños, los hijos de Andres y Mª Jesus . Que buenos fueron aguantaron toda una sesión de preboda sin rechistar. Le dieron, una dimensión distinta y maravillosa a mis fotos.
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